martes, 17 de marzo de 2015

Federico Garcia Lorca

Nació en el municipio de Fuente VaquerosGranada (España), en el seno de una familia de posición económica desahogada, el 5 de junio de 1898, y fue bautizado con el nombre de Federico del Sagrado Corazón de Jesús García Lorca;3 su padre fue Federico García Rodríguez (1859-1945), un hacendado, y su madre, Vicenta Lorca Romero (1870-1959) fue la segunda esposa de su padre,4 maestra de escuela que fomentó el gusto literario de su hijo. Su primera casa, en Fuente Vaqueros, es hoy un museo.
En 1909, cuando tenía once años, la familia se mudó a la ciudad de Granada. En su adolescencia, se interesó más por la música que por la literatura, de hecho estudió piano con Antonio Segura Mesa y entre sus amigos de la universidad lo conocían más como músico que por escritor novel.

                                             Lorca (1914).jpg

OBRA DE TEATRO : YERMA
Elogiada por la mejor crítica, desde Unamuno a E. Díez‐Canedo, Yerma (1934) es, tal como la definiera el propio Federico García Lorca (1898‐1936), «la imagen de la fecundidad castigada a la esterilidad» dentro de ese dramático juego universal en el que se mueven las criaturas lorquianas: la oposición entre las fuerzas de la vida, con su destino de libertad, y la opresión que sobre esas fuerzas se vuelca incluso hasta llegar a la muerte.
El rol social de la mujer en un pueblo español a principios del siglo XX parece estar condenada a las labores domésticas y la maternidad, delineando esta perspectiva la estructura familiar. 
La pieza teatral que se origina en el libro, fue escrita por Federico García Lorca en el año 1924 y puesta en escena por primera vez en Madrid bajo la interpretación de Margarita Xirgu. 
En Yerma los prejuicios sociales toman cuerpo en el personaje femenino que da nombre a la obra y van construyendo la narración a través de sus padecimientos y reflexiones. 
Yerma, tiene un único proyecto en el que se entremezclan el deseo personal y el mandato social de ser madre. Un matrimonio sin deseo ni amor, un marido estéril, la presencia de un antiguo pretendiente, se combinan para desarrollar un argumento teñido de tragedia y sutil crítica a una identidad femenina intrínsecamente ligada al orden social establecido. 



www.elmundo.es › Crónica


















No hay comentarios:

Publicar un comentario